El 17 de octubre es una fecha única en la historia Argentina. Es la más significativa en el reconocimiento de la dignidad de los trabajadores, tanto en el derecho a un salario justo, como en las condiciones en que se desarrollan las tareas laborales. Fue tan importante el impacto en las relaciones capital-trabajo, que trasciende un partido político; constituyéndose en parte fundamental de las conquistas populares de nuestro país.
EL FESTEJO EN MENDOZA
La cita en esta ocasión fue el salón Báltico, cerca de la terminal de ómnibus de Mendoza. El entusiasmo de la militancia se hizo escuchar desde temprano; aunque el día estaba con una llovizna intermitente, los cánticos estaban a mil.
El acto comenzó alrededor de las 18,30 horas.
Y empezaron las mujeres.
La primera oradora fue Linco Lorca de SADOP (Docentes privados), por el Sindicato de Amas de Casa, María Laura Palero y una compañera por las mujeres de la CTA.
Las manifestaciones más ruidosas fueron la de Camioneros, al frente del escenario; los militantes de SATSAID y la Cámpora. Iba tomando calor el acto, aclamando a la lista de oradores que se sucedieron, con la fuerza de las gargantas, los tambores y los redoblantes.
Después vino el turno de los varones. Subieron al escenario Sergio “Pichi” Giménez de la Asociación Bancaria; José “Pepe” Scoda de Estaciones de Servicio; Marcelo Aparicio, titular de SATSAID; Gustavo Correa de la CTA; Roly Firmani de ATILRA y Ricardo Letard del Sindicato de camioneros.
Entre los políticos presentes se divisaron a la Senadora Nacional, Anabel Fernández Sagasti, el diputado Adolfo Bermejo, La intendenta de Santa Rosa, Flor Destéfanis, Fernanda Lacoste y Rafael Moyano, entre otros dirigentes. Sin embargo, hubo acuerdo en que se trataba de un acto convocado por las organizaciones sindicales, quienes finalmente fueron los oradores; dando muestras de la fuerza tradicional de los sectores del trabajo en los orígenes del peronismo.
Los discursos ahondaron en los problemas de los trabajadores y trabajadoras de Mendoza; sobre todo los pedidos de aumentos del salario real y el respeto a la discusión paritaria. También una crítica sobre los costos de la canasta familiar de los alimentos básicos para llevar a la mesa de los argentinos. Con la culpa depositada en los formadores de precios; las grandes empresas de alimentos que aumentan todos los días arrasando con el poder adquisitivo de los trabajadores y trabajadoras.
Entre algunas de las consignas del encuentro destacamos: «Lealtad con los leales», pero también se gritó «Unidad de los trabajadores» y « Vamos todos juntos, aún somos pocos, hay que salir y buscar a los que faltan».
No faltaron silbidos al anterior gobierno radical de Cornejo y la quita de salario docente a través del “Ítem Aula”.
Hubo denuncias sobre la precarización del trabajo y las malas condiciones en que trabajan los compañeros de los distintos gremios.
Llamó la atención que faltara gente en la convocatoria. Un trabajador, no es de derecha ni de izquierda, es una persona que brinda su fuerza (intelectual, manual, emocional) precisamente de trabajo. En esa fecha, las medidas que tomó el Gral. Perón, crearon las condiciones sociales para que emergiera con conciencia de clase, un nuevo actor social del siglo XX, desconsiderado hasta ese momento: los trabajadores y trabajadoras argentinas.
¿Será que como son conquistas que ya se lograron, no vale la pena hacer memoria y festejar?
Sería un error garrafal creer eso. Ya que el peligro de perder las conquistas obreras, están a la vuelta de la esquina. Se escuchan voces de los partidos conservadores amarillos como el Pro, por ejemplo, que darían de baja las convenciones colectivas de trabajo, el aguinaldo y tantos derechos más.
Antes del año 1945, todo era desolación, precarización. Un estado de esclavitud para obreros y campesinos.
ANTECEDENTES
Los hechos anteriores al año 1945, fueron el Estatuto del Peón (1) y la creación de los tribunales laborales en 1944.
Fue en el teatro Colón de B.s.As. Un 24 de febrero de 1947 dónde el presidente Juan D. Perón proclamó, mediante un discurso, los 10 derechos de los trabajadores. Tan solo un año después de su asunción a la presidencia, que serían incorporados luego a la Constitución Nacional de 1949 en su artículo 37.
“Nada de este movimiento fue organizado ni preparado. El coronel pidió a sus amigos, los trabajadores, que no hicieran nada y se limitaran a cumplir el lema de acción obrera: “De casa al trabajo y del trabajo a casa”; “venceremos no con la violencia, sino con la inteligencia y la organización”; “estemos siempre unidos y venceremos”. Ello se cumplió hasta que la clase trabajadora vio a su líder preso; después, espontáneamente, la masa se agitó y se puso en marcha; nada la detendría, pues avanzaba con “la Verdad” y “la Justicia”, y ya lo había dicho el líder: Montados en la verdad no necesitamos espuelas”.(2)
Hay sectores de clase media y profesionales muy volubles a los procesos históricos. Pierden rápido la conciencia de los derechos. Abandonan las luchas y pisotean las conquistan. Sólo los sectores obreros se mantienen en alerta permanente. Saben que la lucha es día a día. Los sectores de la antipatria no descansan y quieren volver a un estado de semi-esclavitud en la Argentina.
Por eso hoy como ayer las conquistan deben ser cuidadas y defendidas con movilización y organización permanente.
Los trabajadores lo saben.