Afirmar esto resulta casi obvio. La realidad puso al descubierto nuestra vulnerabilidad. Nuestra debilidad como seres humanos, la cual se hace visible en toda la extensión de nuestro planeta. Observemos con detenimiento:
PROBLEMAS AMBIENTALES SERIOS.
Uno de los principales es la crisis climática ocasionada por el cambio climático,resultando una amenaza real para todo lo viviente. Continuamos emitiendo gases de efecto invernadero que calientan el planeta a través del gas más conocido el CO2(dióxido de carbono). El Acuerdo de París,hace un llamado desesperado a las superpotencias(Basta de fabricar y consumir, bienes y productos superfluos!!!) para mantener el calentamiento global muy por debajo de los 2 °C y prosiguiendo los esfuerzos para limitarlo a 1,5 °C.
Estos desequilibrios,sumados a la contaminación, la escasez de agua, la degradación del suelo,la deforestación,la utilización desmedida de hidrocarburos,ponen en peligro de extinción las especies y la pérdida de biodiversidad;debemos conservar la variedad para mantener vivos todos sus ecosistemas terrestres y marinos.
Estas situaciones, colocan en serio riesgo, tanto la salud de las personas,como la agricultura y la soberanía alimentaria de las poblaciones. Este fenómeno es causado por nuestras conductas mal orientadas,por ejemplo el consumismo. Una cosa es consumir lo indispensable para vivir y otra es el consumismo;que no es otra cosa que la utilización compulsiva de productos y bienes innecesarios que lejos de atender a necesidades básicas, solo favorecen el deterioro del ambiente y la convivencia humana.
PROBLEMAS SANITARIOS PREOCUPANTES.
La pandemia nos cambió el prisma de la vida. La ciudad de Wuhan, China fue el “inicio” del brote en diciembre de 2019.Aunque conocimiento confiable asegura que desde 2015, había información sobre lo que iba a ocurrir.
Para entender un poco más sobre cómo ubicarnos frente al Covid-19, creo conveniente leer el artículo de Sandrine Revet :”La antropología de los desastres”.Esta explicación no le da “sentido” a lo que está sucediendo, sino que nos permite ver cómo los humanos confrontan y le dan sentido a lo que están atravesando. Se ha demostrado durante mucho tiempo que los desastres no nivelan las desigualdades, sino que las profundizan y empeoran.
Como contrapartida a esta postura, hay un discurso que surgió en los años ochenta y noventa en torno a la idea de “riesgos globales” y, en particular, Ulrich Beck afirma que los riesgos contemporáneos tenían la característica de unir a la humanidad bajo la misma condición de vulnerabilidad, la antropología ha demostrado claramente que, dependiendo del contexto, esta vulnerabilidad se declina de manera diferente y conduce a enfrentar las situaciones de peligro con diferentes tipos de recursos. La antropología también hace posible, acercándose más a las personas y grupos que estudia, matizar estas tendencias principales, al mostrar, por ejemplo, los recursos inesperados de ciertos grupos considerados como “vulnerables”, que han desarrollado habilidades para lidiar con situaciones cotidianas críticas y que a veces son menos desestabilizados que otros frente a la irrupción del “desastre”.
Una cosa es considerar a la pandemia un desastre universal y confluir hacia conductas de cuidado, solidaridad y cooperación y otra muy diferente es entender que es una nueva oportunidad de hacer negocios y acrecentar las ganancias. Y aquí me refiero a los laboratorios científicos y medicinales, la especulación financiera, el desarrollo materialista de las potencias mundiales (EEUU,Rusia y China) y un nuevo orden mundial, con países más ricos y países más pobres.La tendencia es claramente la segunda.
PROBLEMAS SOCIALES QUE ALARMAN.
Como consecuencia de lo expresado están presentes las problemáticas sociales. Sin ánimo de hacer un orden de importancia, se percibe en la realidad cotidiana,la pobreza extrema,la desigualdad,la inseguridad y delincuencia,corrupción,la falta de Justicia,vivienda y trabajo;y lo más preocupante la imposibilidad del acceso a los alimentos básicos, con el 60% de lxs niñxs en la pobreza.
LA SALIDA
Los pueblos originarios nos alumbran con sus saberes.Vaticinan momentos más difíciles para el país y para toda la humanidad.Durante 2021, serán tiempos de aprendizajes distintos a los transitados hasta aquí. Llegarán las vacunas(con la obligatoriedad en debate)y varios tratamientos importantes;sin embargo, continuará la crisis alimentaria, sanitaria y económica.Simplemente porque no hay solución para las mayorías empobrecidas.
Hay que aprender cosas nuevas. Alterar el protoplasma social.
No pasa por estar a favor o en contra del gobierno de turno. Es transformar la sociedad en defensa propia y del ambiente. Es cambiar este “modelo civilizatorio de muerte”; de destrucción del hábitat y de las personas. Las fórmulas que nos trajeron hasta aquí están agotadas. Cada día que pasa se degrada nuestra calidad de vida.
La sociedad civil debe unirse y encontrar los puntos de coincidencia. El cuidado del Agua y los Bienes Comunes, es convocante. Si aprendemos a cuidar el ambiente y todo lo viviente, de allí se desprende encontrar el sentido hacia la justicia ambiental y por ende la social.
Me lo pregunté hace algunos años y lo refleje en un libro:”OTRO MUNDO ES POSIBLE”. Lo sigo sosteniendo:nuestro país tiene en su interior situaciones abusivas de inequidad social. Problemáticas fundamentales, sin resolver, que no hallarán solución por las mismas vías transitadas. Hay que recuperar valores de solidaridad, sentido comunitario de la vida y mejorar nuestra relación con el medio ambiente”.
El futuro no espera. Es ahora. Con una aceleración inalterable, los acontecimientos se van desencadenando velozmente.
Se necesitan mujeres y hombres que adquieran protagonismo para realizar las transformaciones más urgentes.Dar la batalla cultural para que no se apaguen nuestras raíces, nuestra cultura y nuestra palabra.
Es oportuna la letra de la canción, Tiempos Difíciles de JUAN BAGLIETTO”… Brindo por eso, canto por eso,los cementerios de esta ciudad se iluminarán;de infiernos para vengar las almas en cuestión.Y llegarán trocitos de primavera…luego vendrán veranos para el que quiera”.